Más de
medio millar de variedades de olivo catalogadas y documentadas de las 1.200 que
existen en el mundo. Ese es el patrimonio del Banco de Germoplasma Mundial del
Olivo creado en 1977 y en el que trabajan desde entonces la Universidad de
Córdoba y el Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera,
Alimentaria y de la Producción Ecológica, coordinador y miembro del Campus de
Excelencia Internacional Agroalimentario ceiA3. Un Banco que pretende
contribuir a la conservación de la biodiversidad del olivar y poner a
disposición de los olivareros todos los recursos genéticos necesarios para
abordar los grandes retos del sector: sanidad, mecanización y adaptación al
cambio climático, y del Consejo Oleícola Internacional (COI), según se afirmó en
la inauguración de las jornadas técnicas sobre el Banco de Germoplasma del
Olivo.
Foto: A través de Internet: www.alphagalileo.org/ |
A
través de esta iniciativa se da un paso significativo hacia la consolidación de
este Banco como referente internacional de los recursos genéticos del olivo.
Durante
la segunda parte de las jornadas, "se dio a conocer a los viveros la
posibilidad de cultivar plantas certificadas, de más calidad, que garantizan
que el plantón está sano y es auténtico”. En comunidades como Cataluña
"los viveros que plantan olivo lo hacen con plantas certificadas",
sin embargo, los viveros andaluces
"aún no se han animado pero hay que empujarles un poquito para que
produzcan la planta con mayor calidad".
España,
y en concreto Andalucía, lidera la producción de aceite de oliva y de aceituna
de mesa. Por este motivo, a España, como
país el primer productor mundial le interesa tener todas las variedades del olivo
para estudiarlas.
En
España se cultivan 250 variedades aproximadamente de las 1.200 existentes en el
mundo. "Actualmente, en el Banco de Germoplasma del Olivo hay más de 500,
procedentes de España y de otros países, pero se quieren introducir las demás variedades que no están
catalogadas y que existen en otros países olivareros ; esta es la razón por la
que se busca con un acuerdo con el
Consejo Oleícola International (COI), para intercambiar variedades".
El Banco
de Germoplasma Mundial del Olivo cuenta con un programa de mejora de olivo, en
el que se cruzan distintos tipos y, tras un proceso largo de selección, surgen
variedades nuevas, como una de las últimas logradas por el equipo científico y
que han bautizado como Chiquitita. "Se trata de una de las variedades del
futuro porque se adapta muy bien al sistema de recolección con cosechadora, lo
que disminuye enormemente los gastos de recolección y produce aceite de la
mejor calidad.
Con
respecto a los múltiples proyectos de investigación que hay puestos en marcha, se
destaca que “el olivar tiene un problema muy grave que es un hongo de suelo que
mata al olivo, el Verticillium, y da la casualidad que las tres variedades más importantes
de España (Hojiblanca, Picual y Cornicabra) son sensibles a esta
enfermedad". Por eso, se está trabajando para obtener nuevas variedades
que sean resistentes a la enfermedad. Se trata de un proyecto que está
financiado por la Interprofesional del Aceite de Oliva Español.
Fuente: http://www.diariocordoba.com/