En el estado de San Juan (Argentina) se enfrentan a una de las mayores pérdidas olivícolas de la década debido a las fuertes heladas de este invierno (austral) que han diezmado el 30% del cultivo, que son las plantas jóvenes; y en el resto de las plantaciones se estima que habrá porcentajes elevados de pérdidas.
De las 23.000 hectáreas de olivos con las que cuenta San Juan, se cree que las pérdidas rozarán cuando menos las 10.000 ha en extensión (7.000 ha sufren daños serios), aunque para saberlo con exactitud habrá que esterar a la primavera, para ver los efectos en la floraciónEn algunas de las zonas productoras, las plantas han estado expuestas durante varios días seguidos a temperaturas inferiores a los 15 grados bajo cero y los olivos más pequeños ya sufren quemaduras
Aparte, de que estas condiciones tan adversas están afectando negativamente a la cosecha de aceitunas aceiteras que aún queda por recolectar
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