sábado, 14 de enero de 2012

A menos de un mes del comienzo de la nueva recolección en la Rioja (Argentina) comienzan las informaciones.

Todo indica que no será buena la cosecha olivícola del año 2012. Después de un 2011 que marcó récords y fue calificada por los organismos oficiales como histórica, en este año las expectativas son mucho más moderadas.
Aunque todavía no existen valoraciones sobre la próxima cosecha, productores riojanos confirmaron que la situación no es buena. “Inclusive existen emprendimientos que están pensando en no levantar la cosecha” y “se espera una reducción del 60 por ciento menos de mano de obra en relación con el año pasado”.
La próxima semana habrá una reunión clave con la gente de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE).Allí se analizarán los precios que se pagarán en la cosecha y también las condiciones de los trabajadores que tomarán parte de la cosecha.
Actualmente, la situación de la olivicultura riojana no es muy buena a la que contribuyen varias circunstancias que la están complicando aún más:
La crisis internacional, disminuyendo la demanda de productos. La excesiva vinculación de la producción con el mercado brasileño tradicional que está decantándose actualmente por la producción española con precios más competitivos. El incremento de los costes internos que generó el proceso inflacionario que vive el país, y del que resultan unos precios que no son atractivos para los mercados internacionales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario